Roma, 4 de agosto de 2017 – Oficina de Prensa del Hon. Fabio Porta

“Con un post en el blog autorizado por Beppe Grillo, el M5S descubre que en Italia existe una legislación avanzada que regula estrictamente y minuciosamente el sistema de permisos para la exportación de armas. Si hubiese contribuido a ejercitar con seriedad y atención las prerrogativas que la misma ley reserva al Parlamento para el control de las exportaciones, sabría que la autorización para los suministros a la policía venezolana, ya ha sido suspendida. Se trata de una medida que es un deber, que cae dentro del ámbito jurídico en el que operar el gobierno y es consistente con la política seguida por Italia en honor a la amistad y la solidaridad con y hacia el pueblo venezolano oprimido por el régimen de Nicolás Maduro “. Se lee en un comunicado del grupo parlamentario del Partido Democrático en la Cámara de Diputados firmado por la presidente de la comisión de Asuntos Exteriores, Lia Quartapelle, y el diputado PD elegido en América del Sur, Fabio Porta.

“Para contribuir de manera positiva con la salida de las crisis internacionales, es necesario trabajar con cuidado y constantemente para profundizar en la información y evaluar las posibles medidas a tomar”, escriben los diputados. “Desafortunadamente, no es el método que están acostumbrados a trabajar con los colegas de M5S. A los textos de los procedimientos parlamentarios que durante más de un año transcurren en comisión, prefieren las páginas de los periódicos y de las redes sociales, con declaraciones inapropiadas, contradictorias, instrumentales y ridículas, que a veces confunden Chile con Venezuela y que encontraron su máximo en la misión embarazosa a Caracas la cual ahora están tratando por todos los medios de borrar de la memoria”.

“En nuestro papel como parlamentarios democráticos”, concluyen Quartapelle y Porta, “hemos apoyado las importantes acciones democráticas y pacíficas llevadas adelante por la comunidad venezolana en Italia y en el mundo para hacer un frente contra el plan del presidente para establecer una Asamblea Constituyente, reescribir la Constitución y obtener plenos poderes. Un plan que incluso el jefe de gobierno, Paolo Gentiloni, ha condenado sin pelos en la lengua, lo que confirma la determinación de Italia para defender y promover los derechos, principios y valores en los que nos reconocemos como ciudadanos italianos y europeos”.