ROMA, 15 de noviembre de 2017
En las negociaciones en curso sobre las pensiones entre el Gobierno y los interlocutores sociales los italianos que viven en el extranjero también deben ser considerados.
Este es el contenido de la carta que los diputados elegidos en el exterior, Marco Fedi y Fabio Porta remitieron al presidente del Consejo, Paolo Gentiloni y a los Ministros de Trabajo, Giuliano Poletti y de Economía y Finanzas, Pier Paolo Padoan.
Como se sabe, de hecho, en estos días estamos discutiendo y decidiendo cómo bloquear el aumento en la edad de jubilación que se espera para 2019 a varias categorías de trabajadores que llevan a cabo actividades denominadas “pesadas”. Los dos diputados recuerdan al Gobierno que hay muchos italianos en el exterior que han pagado contribuciones en Italia y llevan a cabo actividades pesadas o fatigosas en el extranjero, y solicitan que se les apliquen los anticipos previstos también a ellos.
En la carta, Fedi y Porta ponen en evidencia que después de las negociaciones con los interlocutores sociales, el Gobierno se prepara para presentar una propuesta que pretende eximir a los empleados de trabajos pesados de los ajustes a la esperanza de vida en la edad de jubilación actual (además de introducir una extensión del Ape Social y nuevas reglas sobre la jubilación anticipada para los trabajadores precoces).
“Hemos aprendido -escriben los dos diputados- que a partir de los ajustes sobre la esperanza de vida se excluirán 15 categorías de trabajadores asignados a tareas particularmente pesadas siempre que contribuyan con una antigüedad de al menos 30 años de contribución y hayan realizado el trabajo pesado por lo menos siete años en los últimos diez años de trabajo. En virtud de la interrupción del ajuste de la esperanza de vida, estos trabajadores continuarán pudiendo jubilarse a los 66 y siete meses también a partir de 2019”.
Fedi y Porta le manifiestan al Gobierno que consideran oportuno en ese punto que el Gobierno y los Ministerios competentes aclaren si tales medidas se aplicar también a los ciudadanos residentes en el exterior que tengan una contribución previsional en Italia y en el País de residencia con el que Italia haya firmado un acuerdo de seguridad social bilateral o multilateral (reglamentos de la UE). Sería, resumiendo, útil y necesario, según los dos diputados, entender si los 30 años de contribución previstos por la propuesta del Gobierno podrán ser comprobados con el mecanismo de la totalización con las contribuciones realizadas en el exterior por parte de los jubilados italianos residentes en el exterior y, si es posible, qué modalidades, normas e instrumentos podrán ser utilizados para comprobar, en el exterior, los requisitos para el derecho a los beneficios con respecto a la tipología de trabajos pesados.